Cristina Pombar, socia nº 1014: «En este número vamos dos socios, mi padre y yo»
Llevo tanto tiempo en ASION que casi no me acuerdo de cómo conocí la asociación. He sido voluntaria (ensobrando tarjetas de navidad y pulseras, en ocasiones esporádicas en el hospital…), durante un periodo muy breve de tiempo trabajé como administrativo y también he sido vocal en junta directiva participando en las juntas y aportando a los objetivos de la asociación.
Ahora soy “solo” la socia 1 014, pero participo en todas las actividades que puedo. Mi favorita es la Fiesta Solidaria de octubre, aunque también está la Lotería y la cena de Navidad, la asamblea general y muchas otras iniciativas. Siempre he hablado de la asociación para fomentar la participación en sus actividades y en alguna ocasión ha sido a un familiar o vecino de alguna familia en la que un niño había sido diagnosticado de cáncer.
Llevo como socia unos 15 años, quizá más. Continúo, no sólo porque conozco a muchos miembros de la asociación, sino por los valores que les acompañan y que hacen de ASION un paraguas en la tormenta, es un paraguas desinteresado que ayuda a los niños y sus familias en un momento de incertidumbre y miedo. Y traen cierta tranquilidad y seguridad, que hace que las familias puedan centrarse en lo importante: su hijo.
Antes de que yo conociera la asociación, mi padre ya era socio. Y sé que para mi padre, participar con la cuota era participar en los valores y la labor de la asociación para mejorar la calidad de vida de los niños con cáncer y la de sus familias.
Mi padre nos dejó hace unos años y yo decidí sumar su cuota a la mía. Él participaba de los valores de ASION y sigue participando a través de mí. Yo soy sólo la socia 1014, pero en este número vamos dos socios, mi padre y yo.
Firmado: Cristina Pombar, socia número 1014.
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